DICHOSOS ELLOS
Dichoso el que llora,
Dichoso el que llora,
pero por dentro ríe
angustiado por el clima de su pensar
fatigado por un jubilo innecesario
sentido al no mirar atrás.
Como cuando cae una hoja,
y una gota de agua vieja
humedece la espalda taciturna
de una rosa de antaño.
Cuando nada es etéreo
y el querer y el pensar
se dibujan en la calle
y en la sonrisa del océano.
Dichoso el que pisa suelo
afortunada la lágrima que sale de tu ojo,
orgullosa y libre como un canario
pero triste como el pez que cae en anzuelo.
Gritar o callarse forman parte de lo mismo,
pero dibujar un futuro no es lo mismo,
si el mundo se detuviese
¿no se perderían tus sueños?
Si el mundo no se dirige hacia el sur de tus recuerdos,
¿Donde quedaría tu futuro?
L. UTRIA